Sábado, 7 de octubre: Saldremos a las 8:30 y la hora estimada de llegada serán las 12:15. El recorrido pensado es el siguiente: Erandio, Mungia, Gerekiz, Olabarri (avi), Mungia, Unbe, Erandio. Total: 85 km ; Desnivel: 680mNota: Tal vez se forma grupo para dar la vuelta a Gernika.

Larunbata, urriak 7: Erandiotik 8:30-etan atera eta 12:15-etan etxean izango gara. Hauxe da egingo dugun ibilbidea: Erandio, Mungia, Gerekiz, Olabarri (hornidura), Mungia, Unbe, Erandio. Guztira: 85 km ; Desnibela: 680m Oharra: Agian talde bat sortuko da Gernikako ibilbidea egiteko.



Domingo, 8 de octubre: Saldremos a las 8:30 y la hora estimada de llegada serán las 12:30. El recorrido pensado es el siguiente: Erandio, Barrika, Plentzia, Armintza, Lemoiz, Jata, Bakio (avi), Larrauri, Mungia, Butrón, Unbe, Erandio. Total: 90km ; Desnivel: 1300m. Nota: Algunos Kotes que están en muy buena forma han acudido a la SKODA GRAN FONDO Y MEDIO FONDO SAN SEBASTIAN. El relato de su aventura se puede leer al final de la entrada.      

Igandea, urriak 8: Erandiotik 8:30-etan atera eta 12:30-etan etxeratuko gara. Pentsatuta dagoen ibilbidea hauxe da: Erandio, Barrika, Plentzia, Armintza, Lemoiz, Jata, Bakio (hornidura), Larrauri, Mungia, Butrón, Unbe, Erandio. Guztira: 90km ; Desnibela: 1300m. Oharra: Sasoi ezin onean dauden zenbait kotek SKODA GRAN FONDO Y MEDIO FONDO SAN SEBASTIAN ibilbidean parte hartu dute. Haien abenturak irakur ditzakezue sarrera honen amaieran.

Lo primero que hago al despertarme, como cada domingo desde hace ya casi un año, es mirar por la ventana, esperando ver el sol. Mala suerte, ya estamos en octubre y todavía es de noche. Miro la aplicación del tiempo y parece que dan un sol espléndido… pero 6 grados! Me consuelo viendo que a lo largo del día mejorará, así que opto por llevar la equipación desmontable: manguitos, perneras, y chaleco.

Nada más salir de casa me doy cuenta de mi error, pero voy justo de tiempo (para variar) y ya no hay vuelta atrás. Tocará pasar un poco de frío hasta que lleguen los primeros repechos.

A las 8:25 llego al embarcadero y allí ya hay reunido un buen grupo de Erandiokotes, todos vestidos de largo. Con puntualidad británica salimos rumbo al mar: aprovechando que los más peleones están en Donosti, esta semana toca Jata, lo cual ha provocado airados comentarios en el chat, e incluso alguna propuesta de salida alternativa. Para calmar los ánimos, los gallos que se han quedado por aquí han prometido no meter mucha caña. A ver si es verdad.

Y así empieza la salida: ritmo de calentamiento por la carretera de la Ría, charlando y poniéndonos al día de nuestras cosas. Casi sin darnos cuenta llegamos a Sope y empezamos a subir hacia Barrika y, también casi sin darse cuenta, El Presi y Rubén se ponen a tirar del grupo y a bajarnos la moral a unos cuantos. Empiezan a sonar las alarmas en el Garmin, las rodillas comienzan a crujir. Por suerte, Joseba tiene un oportuno pinchazo y, aunque llevamos mecánico en el grupo, unos cuantos nos paramos “por si hace falta un poco de ayuda”.  Aprovechamos también para regar las zarzas ya que esta grupeta es famosa por no esperar a los meones, y para juntarnos con Mikel y su Cannondale, a quienes se les habían pegado un poco las sábanas.

Una vez cambiada la cámara, continuamos camino. En la rotonda de Gorliz hay una pequeña confusión y, mientras el grueso del pelotón va por abajo, un reducido grupo de valientes de primera hora tira para Andrakas, parece que Jata les sabe a poco.

Nos juntamos de nuevo en la bajada a Arminza, y afrontamos el inicio del puerto como un grupo ordenado, resplandecientes en nuestras equipaciones que tanto horrorizan a algunos. Un placer para la vista. Pero el placer dura poco, porque en seguida algunos de los veteranos empiezan con su guerra particular, y algunos de los jóvenes hacen una demostración de poderío físico. Yo me quedo solo y voy  vigilando el pulsómetro (que no baja de 180), hasta que veo a Kata (que normalmente sube con un ladrillo para el chalet y el domingo se sentía ligero como un colibrí) y a Igor subiendo como dos cohetes teledirigidos, así que hago un último esfuerzo y llegamos los tres juntos al mirador. Allí nos están esperando El Presi, Maisu (que han subido dándose codazos el uno al otro), Rubén y los dos Mikeles. Como la espera se le estaba haciendo larga, y como había coronado primero y tenía que fardar un poco, Mikel Álvarez volvió a por los rezagados y, por fardar, se fue al suelo. Algunas fuentes anónimas dicen que le hicieron un Bouhanni, pero no hay nada confirmado. Por suerte todo quedó en un golpecito en la rodilla que servirá como excusa en el futuro. Nos hacemos el selfi de rigor en el mirador, cortesía del mecánico con la cabeza más grande de la Margen Derecha, y bajamos rumbo a Bakio para el tan necesitado avituallamiento. Durante la bajada Maisu entrena para la QH18, y El Presi entrena… tapar el hueco. En Bakio, café y pintxo al solete y una segunda foto por si acaso en la de arriba sólo se veía la cabeza de Igor.

Una vez cargadas las pilas nos ponemos nuevamente en marcha. El frío matutino ya es cosa del pasado, y los chalecos y chaquetas van en el bolsillo del maillot. Mantenemos el grupo compacto hasta llegar a Larrauri, donde Joseba decide poner a prueba su entrenamiento para el Campeonato de Colegios de Médicos y ataca, dejándonos a todos atrás.

Poco antes nos habíamos dado cuenta de que no habíamos visto a Mikel800 desde Bakio, nadie sabe muy bien qué ha pasado: ¿habrá pinchado? ¿se habrá quedado con ganas de más después de Jata y se ha ido a San Pelaio? Cualquier cosa es posible… Nos juntamos de nuevo casi en Mungia, y aún hoy no sé muy bien qué fue lo que pasó.

Suave suavecito, poquito a poquito llegamos a la rotonda de Urduliz para empezar a subir Umbe, con la esperanza de que seamos todos formales y no haya valientes de última hora. Pero, como no podía ser de otra manera, los que aún tienen fuerzas no son capaces de mantener el ritmo de samba que llevamos los de atrás y se produce la clásica desbandada. Al parecer Kata tenía una espinita clavada desde Jata e intentó atacar, pero le pusieron en su sitio.

De nuevo nos juntamos para la bajada y, por fin, conseguimos hacer los últimos kilómetros todos juntos y a un ritmo ya más agradable. A unos cuantos nos pesa la falta de entrenamiento y en cada repecho los muslos protestan, a otros les habrá resultado muy light… pero todos estamos contando ya los días para volver a juntarnos el domingo, a las 8:30, en el embarcadero.

Guille – Bekario Residente



PRUEBA SKODA GRAN FONDO SAN SEBASTIAN – 2017/10/08

Domingo 8 de octubre 6 15 am de la mañana, suena el despertador, estamos en Donosti, 184km nos esperan por delante… En ese momento se nos viene a la cabeza lo bien que hemos hecho en hacer noche ahí y no tener que pegarnos el madrugón del año para ir en coche esa misma mañana desde Bilbao. Desayunamos leche cereales plátano… siguiendo los consejos alimenticios que un sabio Kote nos ha compartido. Salimos a la calle para comprobar el tiempo y que frío!! 6º que no hacen mas que aumentar los nervios y las dudas sobre la ropa que vamos a llevar encima de nuestras burras. Con toda la indumentaria puesta todavía nos queda acercarnos hasta la salida y el tiempo se nos echa encima.

8:00am sin estirar ni calentar y últimos en el cajón de salida pero ahí estamos a tiempo para tomar la salida.

Comienza la marcha rodando suave adaptándonos a la bici y de repente se escucha; mierda me he olvidado poner el cuentakilómetros!!! No podía faltar el olvido de algún elemento por parte de Miguel, y es que se podría escribir un libro con sus despistes, pero eso lo dejamos para otro día. Seguimos rodando y sin darnos cuenta encaramos las primeras pendientes de la marcha y es ahí cuando empiezan las fracturas en el grupo, Sendoa y Miguel se lo toman con mas calma guardando con temor a lo que todavía queda por venir, Rubén y Aritz,(corredor independiente que aspiramos a integrar en la grupeta algún día no muy lejano), tiran sin guardar energía dejándose llevar por  las buenas sensaciones del comienzo. En la cima de la primera cota, Basakabi, ya van 49km y estamos en el primer avituallamiento. Hacemos la primera la parada para reponer fuerzas y reagrupar el grupo.

Continuamos con el frío metido en el cuerpo y enlazamos la bajada con la segunda cota del día, Saldias, y es ahí con los primeros rayos de sol dejándose ver después de un comienzo sombrío donde afrontamos las rampas mas duras de la ruta. En esas Aritz sufre un resbalón en la rueda delantera teniendo que poner pie a tierra reincorporándose sin mas problema y el resto en pleno esfuerzo y siguiendo los consejos de otro Kote, “el grupo no espera a uno” seguimos hacia adelante confiando en la gran subida que había hecho anteriormente, y que nos cogiese durante la marcha. Pero cual es nuestra sorpresa que pasa la subida y no aparece, ha explotado fisicamente y todavía le quedan 120km por delante. En la cima volvemos a reagruparnos y andamos juntos hasta el segundo avituallamiento situado a pie de la tercera cota del día, Uitzi, Sendoa y Ruben suben por delante, Miguel como buen sufridor lo da todo para no tener mucha diferencia con ellos y el cuarto integrante intenta subir como buenamente puede. En la cima nos reagrupamos de nuevo.

Hacemos la bajada en grupo comentando sensaciones y auto-animándonos, ya solo quedan 2 subidas y lo tenemos! Comenzamos la cuarta cota, Alkiza, una subida agradable y bonita, la subiremos como la subida anterior, Sendoa y Rubén por delante, Miguel detrás siguiéndoles el rastro y Artiz sobreviviendo como buenamente puede. En la cima nos espera el cuarto avituallamiento que de nuevo lo aprovechamos para reagruparnos.

Continuamos, 50km por delante y la última cima, Andazarrate, al igual que la última subida, vemos bonitos paisajes y se cumple la tónica anterior, Sendoa y Rubén suben a su ritmo por delante, Miguel de nuevo sorprendiéndose con su inesperada buena condición física llega unos segundos por detrás y Aritz haciéndose amigo de un primo lejano de Nairo Quintana pasa la subida lo mejor que puede. Llegamos separados a Aia donde se ubica el último avituallamiento y nos reagrupamos para afrontar los últimos 30km del día, rodamos fácil con algún calentón que otro y ya con la mente puesta en Donosti.

16:00 pm fin llegamos! Rotos por un repecho final de 1km que pasa factura a los integrantes mas escasos de fuerzas. Pero con la mente puesta en la pasta party, la ducha y las ganas de llegar a casa para reventar la cama!!!

Primera gran fondo para los cuatro cumplida con éxito y pensando cual será la siguiente ya como miembros oficiales del club y con las preciosas equipaciones en nuestra piel.

Miguel y Rubén

PRUEBA SKODA MEDIO FONDO SAN SEBASTIAN – 2017/10/08

6.30 suena el despertador y en ese momento piensas: ¡Qué coño hago aquí si todavía es de noche! Con más sueño que fuerzas te levantas y a desayunar. 7:30, aun oscuro, quedamos Ibai y yo (Peio) en Trintxerpe para ir hacia Donosti. En el camino recogemos a Jon, fichaje de última hora para la Gran Fondo (en realidad hacemos la media), y llegamos a la rotonda de Anoeta. 8.00, mientras algunos deciden tomarse el último café antes de empezar nos juntamos con Javi, el último de nuestro pequeño pelotón, y vemos como los primeros participantes de la Gran Fondo toman salida.
Poco a poco tomamos posiciones, pero todavía queda unos cuantos minutos de nerviosismo antes de nuestra esperada salida. Mientras pasan los minutos, que pudieron parecer horas, te vas fijando en los demás: bicis, equipaciones (Ibai ya está cogiendo ideas para la próxima equipación)… y ahí estoy yo, el más bilbaíno de todos: con el mallot, un cortavientos y una térmica por debajo como único abrigo ante el frio de primera hora de la mañana.
Por fin dan la salida a las 8:30 y vamos calentando motores para ir cogiendo ritmo antes de llegar a los primeros repechos. Empezamos a subir, bajar… y llega un momento en que todo el mundo piensa que ya estamos subiendo el alto Basakabi, pero… no. Son solo las primeras rampas que nos llevan al cruce de Arano (ya Navarra), lugar del primer avituallamiento y primer “pis-stop”.
Tras bajar a Goizueta, la carretera empieza a picar muy poco a poco hasta un ligero descenso. Es justo en esta subida donde Ibai realiza su buena acción del día: un ciclista que subía a plato porque no le entraba el pequeño. Mientras Jon y yo seguimos adelante, y de Javi no sabemos nada ya que le damos libertad para ir a su ritmo en los puertos. Tras pasar al lado de una pequeña cantera derruida empiezan los últimos kilómetros de la primera subida del día, algo más duros que los primeros.
Coronamos el puerto de Basakabi y recuperamos fuerzas mientras comemos algo (algún que otro bizcocho, fruta y bebida). Rápida bajada hasta llegar a Leitza y un buen tramo para poder rodar camino a Tolosa. Todo parecía bonito hasta que una vez de vuelta en Guipúzcoa y poco antes de llegar a Berastegi nos encontramos con la primera gran trampa del día: un repecho de 900m con rampas del 8% de media, tal y como nos avisa la señal que hay a pie de repecho. Tras esta deceleración volvemos a coger velocidad hasta llegar a Tolosa con terreno favorable.
Tras pasar Tolosa, comenzamos el segundo puerto del día: Alkiza. Un puerto cortito (de solo 4km) comparado con los 13km de Basakabi, pero con rampas más exigentes. El puerto empieza con un tramo duro, en el que encontramos un túnel en construcción (posible atajo para próximas ediciones jejeje). Poco después de que nos pasen los primeros de la Gran Fondo llega el tramo de descanso, pero no de descenso, en el que cogemos aire para afrontar la última parte de este puerto. Tras este “descansillo” volvemos a las rampas, y a la entrada del pueblo, cuando parece que has llegado ya al avituallamiento la rampa se vuelve a endurecer en los últimos 150 metros.

Una vez llegados al avituallamiento respiramos tranquilos (algunos más que otros): ¡Por fin! Volvemos a coger alimentos para afrontar los últimos 50km e inmortalizamos el momento con la foto de los 4. Es la última vez que estamos los 4 juntos ya que Jon decide coger el camino a casa ya que se había sumado a la ruta sin estar apuntado y sin poder entrenar el último mes.
Toca subirse a la bici y coger velocidad durante la bajada antes de empezar el último puerto de la Gran Fondo. Bajada muy bonita en la que aprovechamos a poner nuestras mejor caras para los fotógrafos que están apostados en algunas curvas de la bajada. Y una vez acabado el descenso vuelta a subir. Ibai y Peio ponemos un ritmo para poder ir los dos cómodamente y empezamos a pasar a la gente. Es la última gran subida del día, por lo que tampoco tenemos mucho que guardar, ¡hay q ganarse la gorra de finisher! El puerto se me hace un poco largo y llego desfondado hasta donde Javi que nos esperaba en la cima.
Atarse el chaleco y bajada hasta Aia. Bajada bastante bonita por la orografía que nos rodea, como prácticamente toda la marcha. Una vez en Aia cogemos fuerza para el último tramo y…! por fin hay plátanos! Tras este último parón, seguimos bajando hasta Orio disfrutando del paisaje y poniendo nuestras mejores sonrisas a los flashes. Tras llegar a Orio nos quedan los últimos 20 km. Un terreno bastante traicionero para este último tramo ya que las fuerzas no nos sobran demasiado. Realizamos estos últimos kilómetros los 3 juntos subiendo pequeños repechos. Un terreno sube baja que finaliza con la segunda trampa del día: la subida a Galarreta. Otro de esos repechos matadores y más teniendo en cuenta que llevas unos cuantos kilómetros de recorrido.
Tras subirlo con más corazón que cabeza y sacando fuerzas de donde no hay, un pequeño descenso por Miramón. Una vuelta por Illunbe y la última rampa antes de afrontar la bajada definitiva a Anoeta. Vuelta entera a la rotonda y nos dirigimos a meta. Nos cogemos de la mano y ¡entrada triunfal con una imagen para el recuerdo aún mejor!
Pero aquí no acaba todo. Una vez pasada la pancarta de meta nos dirigimos al velódromo y como vencedores de la gran clásica del “Infierno del Norte” damos la vuelta al velódromo. Una vez realizada la vuelta de honor recogemos el merecido regalo: ¡la gorra! Que para algo hemos recorrido 126km. Una vez hechas las fotos en el velódromo toca disfrutar de lo que resta del día y coger la cama con más gusto que de normal.
Una marcha bonita y quién sabe si repetiremos…

Peio